Descripción
Asentado en lo alto de una colina a modo de bastión, se levanta un monolito oscuro, silencioso, que abre sus ojos a la histórica ciudad de Grenoble. Es la Résidence Saint-Ange, construida por Odile Decq en madera para respetar el entorno e inspirar a los artistas que temporalmente la habitan.
Texto: Miguel Quismondo Fotografía: Rland Halbe / Estudio Odile Decq