Los hermanos Díaz de Bustamante presentan sus ‘Estancias del alma’ en Málaga
Por primera vez, las cajas de luz de Carlos Díaz de Bustamante se mostrarán junto a las pinturas oníricas de su hermana Verónica en las Salas Mingorance del Archivo Municipal de la ciudad. Se trata de medio centenar de piezas con diferente temática y técnica donde, sin embargo, confluyen las mismas raíces malagueñas como el Jardín Botánico de La Concepción y el Castillo de Santa Catalina que ambos conocieron en su infancia.
Ocurre a menudo que el artista regresa a los recuerdos infantiles cuando busca la inspiración. Quizá porque es ahí donde descubrió el mundo, los colores, la luz o las texturas que esconde la naturaleza con su multitud de formas.
Carlos y Verónica Díaz de Bustamante Loring se criaron en Málaga, rodeados de un entorno privilegiado como el vergel con más de 50.000 plantas que sus antepasados Jorge Loring y Amalia Heredia crearon a mediados del siglo XVIII tras su luna de miel.
Este espacio pronto se convertiría en el Jardín Botánico de La Concepción, auténtico paraíso con flores de todos los países de Europa.
La riqueza de matices y tonos cromáticos debieron de influir sobre la obra de los hermanos, que ahora rinden homenaje a este espacio verde gracias a la muestra Estancias del alma. Regresan así a la infancia, planteando un diálogo sutil entre las instalaciones de luz de Carlos y las composiciones más poéticas de Verónica. La muestra propone un recorrido donde la naturaleza se entrelaza con la arquitectura árabe –movidos también por sus estancias en el Castillo de Santa Catalina, donde el conde de Mieres, Manuel Loring, estableció su residencia en 1929–; un paseo visual donde los personajes susurran secretos o los sueños se confunden con los recuerdos.
En el caso de Carlos Díaz de Bustamante (Madrid, 1963), se exponen 24 obras, algunas de ellas cedidas temporalmente por colecciones privadas y otras realizadas expresamente para la ocasión. Todas ellas son trabajos donde el artista muestra su habitual repertorio de cajas de luz; son escenas tridimensionales de jardines, motivos orientales o paisajes oníricos encerrados tras un cristal e iluminados con gran efecto escenográfico.
Casi con el mismo número de obras –25 en concreto–, Verónica Díaz de Bustamante (Madrid 1960), muestra temas semejantes pero desde otra perspectiva: la bidimensional. En su caso, presenta varias composiciones de carácter intimista, escenas costumbristas y lugares remotos que a menudo confluyen en el mar, metáfora de la fuente de la vida.
Estancias del alma podrá visitarse en las Salas Mingorance del Ayuntamiento de Málaga hasta el 24 de junio.