La sede del Hermitage de Barcelona, ¿más cerca de convertirse en una realidad?

El pasado 27 de mayo el Consejo de Administración del Puerto de Barcelona otorgó la licencia al museo del Hermitage en la ciudad, que irá de la mano junto al Teatro del Liceo. Su pretensión es poder abrir sus puertas en 2024. La noticia no ha estado exenta de controversia y ha reavivado las distintas posturas, unas a favor y otras en contra, para la aprobación de un proyecto que arrancó hace casi una década.


En el pasado 2012, la Generalitat catalana iniciaba las gestiones para la instalación en Barcelona de una sede del Museo del Hermitage de San Petersburgo, de manera similar a lo que se venía haciendo desde el año 2000 en Amsterdam o Ferrara. Su intención era situarlo en el Puerto de Barcelona, en las inmediaciones del Hotel W.

La propuesta debía poner de acuerdo al museo ruso, a las distintas autoridades de la ciudad y al grupo de inversión privada que lo promovía. Desde entonces, esta ha sufrido numerosos contratiempos a causa de la falta de acuerdo entre unas y otros en pos de la viabilidad, o no, del proyecto atendiendo a los diferentes intereses de cada una de las partes.

Pese a ello, la pasada semana el Consejo de Administración del Puerto de Barcelona otorgó la licencia al museo del Hermitage en la ciudad pese al nuevo rechazo por parte del Ayuntamiento de la Ciudad Condal. La concesión está condicionada, como han indicado algunos medios de comunicación, a que en los dos próximos meses el museo presente un proyecto conjunto junto al Teatro del Liceo.

Fachada Sur del proyecto del Museo Hermitage de Barcelona. Imagen tomada de "Plataforma Arquitectura". Cortesía de Tioyo Ito & Associates, Architects.
Diseño del proyecto del Museo Hermitage de Barcelona. Imagen tomada de "Plataforma Arquitectura". Cortesía de Tioyo Ito & Associates, Architects.

La primera fase del proyecto arquitectónico fue diseñada entre 2019 y 2020 por el estudio del ganador del Premio Pritzker, Toyo Ito. Tal y como puede consultarse con detalle en la página web de Plataforma Arquitectura, el edificio, de 13.300 metros cuadrados, contará con una fachada nítida y ondulada a imitación de las olas del mar sobre las que se reflejará. Asimismo y siguiendo con la normativa medioambiental vigente, contará con una alimentación energética solar e hidrotermal marina.

The Art News ha recogido las palabras del director general del Museo del Hermitage, quien en un comunicado ha defendido la propuesta calificándola como «un puente para el intercambio cultural entre San Petersburgo y Barcelona», añadiendo además que esta nueva sede jugará un importante rol «tanto para la población local como para los visitantes». Por el contrario, el consistorio barcelonés, apelando a razones medioambientales y financieras, ha vuelto a rechazar la concesión y ha valorado de emprender acciones legales atendiendo a la decisión unilateral del Puerto de Barcelona de iniciar los trámites para la construcción del edificio.

Veremos por tanto cómo se desarrollan los acontecimientos para ver si finalmente abre sus puertas, o no, el museo en el 2024.