LA OBRA MÁS CARA DE LA HISTORIA
Noche histórica en Christie’s Nueva York con la venta del mayor descubrimiento de arte en los últimos 100 años. Salvator Mundi ha alcanzado un remate de 450. 312. 500 dólares (380.849.402€) tras una batalla de 19 minutos entre teléfonos, tarjetas del público y pujas online. Un récord mundial de subastas que dobla el anterior histórico de Les Femmes d’Alger de Picasso (179,3 millones de dólares). Era de esperar, pero lo que no se preveía tanto fue la multiplicación por cuatro del precio de salida (100 millones). Se resumió en un enfrentamiento final entre dos teléfonos. La oferta ganadora fue presentada por Alex Rotter, Co-Presidente de Post-War and Contemporary Art, en representación de un cliente anónimo. El otro teléfono lo tenía Francois de Poortere, Jefe de Departamento de Old Masters en Nueva York. Con el remate de 400 millones del teléfono de Rotter, se oyó un grito ahogado general entre los casi 1.000 asistentes y un ligero revuelo seguido de un gran aplauso, cuando sonó el golpe de martillo tras el rendimiento del cliente de Poortere.
Solo se conocen unas 20 obras del genio del Renacimiento y esta es la única que estará en manos privadas. ¿La volveremos a ver?
Resulta curioso que en 2005 se vendió en una pequeña casa de subastas en América por menos de 10.000 dólares. Claro, no tenía ni siquiera atribución y además estaba cubierto por un barniz grueso y aplicado de forma muy desigual. (Ver aquí la historia del cuadro en el mercado). Los repintes y retoques posteriores no se hicieron con mucho cariño, lo que enmascaraba su posible autoría, además, a saber quién los hizo. La restauración trajo consigo una rigurosa investigación técnica. Efectivamente esta confirmó rotundamente que se trata de un original. Aparte de lo que ya se sabía de los arrepentimientos que dejan ver los rayos X, se descubrió una sucesión de hasta 5 capas de pintura aplicadas al rostro del Cristo, tal y como lo hizo para la Mona Lisa. Asimismo, el último informe habla sobre utilización de soporte de nogal con nudo que verifica la datación, ya que desde 1500, ha causado fractura curva en la tabla que se extiende verticalmente a la izquierda de la cabeza de Cristo (sin pasar por su cara). Según las restauraciones también se ha visto unas características de deterioro que únicamente presentan las pinturas con más de 500 años. De hecho, incluso ha sobrevivido una infestación de gusanos que corroyeron la madera haciendo un pequeño túnel, según el informe de Christie’s. Salvator Mundi llega a ser ignorado más tiempo y por poco nos quedamos sin él.
Tras cientos de años custodiado en colecciones reales y particulares, más de 20.000 personas fueron a contemplar detenidamente el último Da Vinci antes de que volviese a desaparecer. Después de hacer una lenta cola para verlo, a muchos se le saltaban las lágrimas, otros hasta le rezaban.
La imagen del Salvador del Mundo sigue navegando por internet a través de su intensa difusión en las redes sociales. El mundo está boquiabierto con este descubrimiento y venta que han hecho historia. Va a ser difícil superar esto. Ana Robledano Soldevilla