La National Gallery descubre la relación entre Mantegna y Bellini

La National Gallery descubre la relación entre Mantegna y Bellini

A través de importantes préstamos de pinturas, dibujos y esculturas, Londres pone en diálogo a Giovanni Bellini (1459–1516) y a Andrea Mantegna (1430-1506) en una exposición para dar a conocer lo que unió a estos referentes del Renacimiento Italiano.


Giovanni Bellini, "La continencia de Escipión", 1506–8, óleo sobre lienzo, 74.8 x 356.2 cm. National Gallery of Art, Washington, DC, Samuel H. Kress Collection, Imagen cortesía de Board of Trustees, National Gallery of Art, Washington, DC.

No solamente compartían oficio, sino que además eran cuñados, lo que les hizo entablar una amistad que desembocó en un mutuo apoyo en sus éxitos como artistas, hasta el punto en el que el uno sin el otro no hubiese desarrollado dicha carrera y viceversa. Esto ocurrió porque ambos siguieron el camino de la innovación y creatividad contando con su recíproca motivación.

Todo surgió a raíz del casamiento entre Andrea Mantegna, un joven pintor de Padua, hijo de un carpintero, con la hija de una de las familias más relacionadas con el arte de Venecia y alrededores: Los Bellini. El hermano de la novia, Giovanni, era un artista con mucho talento que se centraba en innovar con el característico color de la pintura veneciana, así como con el efecto atmosférico o la luz y el paisaje. El respeto y la admiración profesional fue correspondido entre ambos maestros.

Durante 7 años trabajaron juntos. En esta exposición se comparan distintas obras reveladoras. Por ejemplo se descubre que en una época ambos retrataban al mismo grupo de personas. Se inspiraban el uno en el otro en el ámbito de la experimentación pero cada uno tenía una identidad particular: Mantegna era más intelectual y Bellini más emocional.

Sus caminos se separaron cuando Mantegna, en 1460, decide mudarse a Mantua para ser el pintor de la influyente familia Gonzaga, donde trabajará hasta su muerte en 1506. Bellini murió 10 años después pero no salió de Venecia. A pesar de la distancia, cada uno por su lado siguió desarrollando su creatividad cambiante.

Destacan en esta muestra dos yuxtaposiciones de temática entre los genios: La oración en el Huerto (los dos pertenecientes a la colección de la National Gallery) y la Presentación del Niño en el templo (la de Mantegna en el Gemäldegalerie, Staatliche Museen de Berlín, y la de Bellini en la Fondazione Querini Stampalia en Venecia). También es muy sorprendente las obras casi idénticas del Descenso al limbo (el de Mantegna en colección privada y el de Bellini en el Museo Bristol. Lo mismo ocurre con la Crucifixión de Mantegna y el Calvario de Bellini, ambos del Louvre.

Hasta el 27 de enero de 2018.

Andrea Mantegna, "La presentación del Niño en el templo" hacia 1454, temple sobre lienzo aplicado a madera, 77.5 × 94.4 cm Gemäldegalerie, Staatliche Museen zu Berlin © Staatliche Museen zu Berlin, Gemäldegalerie / Fotografía: Christoph Schmidt
Giovanni Bellini, "La presnetación del Niño en el templo", hacia 1470–5, temple sobre tabla, 80 x 105 cm Museo della Fondazione Querini Stampalia, Venecia © Fondazione Querini Stampalia Onlus, Venecia
Andrea Mantegna, "Descendimeinto al Limbo", hacia 1460, temple sobre tabla y pan de oro, 38.8 x 42.3 cm colección privada, Suiza © Sotheby’s New York