La fotografía vuelve a Madrid en ESTAMPA 2024
La feria de arte, una de las citas más importantes del calendario madrileño, pone el énfasis en una disciplina que en los últimos tiempos no ha contado con todo el protagonismo que merece, gracias a la presencia de Alberto García-Alix como artista invitado.
Uno de los comentarios más repetidos el año pasado en las ferias que se celebraron en Madrid fue “¿dónde ha ido la fotografía?”. La disciplina, a la que no le hace falta ninguna reivindicación y que desde hace tiempo ocupa un lugar de honor entre las bellas artes contemporáneas, se había tomado un respiro y muchos la echaban de menos. Pero esta tendencia ya se está invirtiendo.
ESTAMPA tiene el privilegio de ser la feria que inaugura la temporada cuando el verano todavía está relativamente reciente, pero del todo olvidado. Este 2024 vuelven a su sede habitual en IFEMA desde el 17 de octubre hasta el 20 más de 100 galerías y un millar de artistas de todas partes del mundo.
Como de costumbre, hay como invitado un artista consagrado y este año es el turno de Alberto García-Alix. Una de las figuras más destacadas de la fotografía española, presenta una serie inédita de retratos y paisajes que ocupan una gran pared al lado de la zona VIP y apadrina una edición en la que su disciplina vuelve a tomar una posición destacada.
Son varias las galerías que exponen a fotógrafos. Blanca Berlín y Tamara Kreisler, que este año comparten stand, llevan obras de Isabel Muñoz y Nick Brandt. Durante la inauguración ambas han comentado la ilusión con la que se han propuesto esta colaboración: «Una actitud muy necesaria en el sector».
Spazio Nuovo, una galería romana primeriza en ESTAMPA, expone una serie del fotógrafo Juan Baraja titulada Parnaso en la que explora los volúmenes arquitectónicos de un edificio del mismo nombre construido en 1952 en Oporto. Se trata de uno de los ejemplos del estilo moderno –y heredero de la Máquina de Habitar de Le Corbusier– que perviven en Portugal. Este conjunto es fruto del trabajo que Baraja concluyó en 2022 –y mostró parcialmente en el Museo ICO– y de su estancia en Roma en la Academia de España. No obstante, ahora presenta varias imágenes inéditas.
Helga de Alvear, decana de las galerías españolas –a la que se ha podido ver durante la inauguración–rema en la misma dirección con una instantánea de la espléndida Cándida Höfer, pero su enorme stand tiene cabida también para instalaciones de Ángela de la Cruz y José Pedro Croft o la pintura de Prudencio Irazábal.
Pero ESTAMPA ya ha crecido lo suficiente como para poder centrarse en más de una disciplina. El dibujo, que fue uno de los cimientos de la feria en sus comienzos, sigue teniendo una presencia importante. Un buen ejemplo es otra de las galerías primerizas de esta edición, Graphe, cuya propuesta pone en común acrílico y grafito en un stand en blanco y negro con obra de Fernando Martín Godoy y Sofía Jack, entre otros.
Aunque la disciplina mayoritaria, como es costumbre en las ferias de los últimos años, es la pintura. Desde las apuestas seguras de Cayón con Jesús Rafael Soto y Carlos Cruz-Diez, hasta la propuesta de VETA by Fer Francés, con cuadros de Santiago Ydañez, Cristina Lama y Erik Parker, que se desmarca con las enormes cerámicas de Julio Galindo.
En el caso de Galería Llamazares, varios de sus artistas exploran los límites de la pintura, combinándola con otras disciplinas, como con la obra de Guillermo Peñalver –collage y dibujo–, Estefanía Martín Sáenz –textil y pintura– y Fernando Barrios Benavides. Este último explora –en unos autorretratos de gran formato que transitan entre la abstracción y la figuración– la relación entre el individuo y la ciudad que lo rodea, y une en una misma superficie materiales de construcción con collage, dibujo y pintura.
También tienen cabida propuestas de arte conceptual como la presentada por Arniches 26 con una serie de Irene Luna. La artista se ha servido de cajas para transportar obras de arte y en su interior, en la espuma protectora, ha vaciado la silueta de todas las casas que ha habitado a lo largo de su vida, creando una relación entre el valor sentimental y el material.
Esta edición de ESTAMPA tiene todos los componentes para ser un éxito, pero llega en un momento complejo para el mercado internacional y difícil de predecir. Hace unos días Frieze en Londres sorprendió a todo el mundo por sus buenos resultados, pero esta semana a Art Basel París le está costando arrancar. Un buen día inaugural puede marcar la tendencia para una feria, así que en unas horas podremos saber hacia dónde se inclina la balanza en Madrid. Héctor San José.