LA FOTOGRAFÍA COMO EXPERIENCIA VITAL: ‘DE LABORIS’. PIERRE GONNORD

Vengador. 2014. De laboris. Pierre Gonnord. Museo Universidad de Navarra.

LA FOTOGRAFÍA COMO EXPERIENCIA VITAL: ‘DE LABORIS’. PIERRE GONNORD

Como ya se ha hablado en otros artículos de ARS, el proyecto “Tender Puentes” del Museo Universidad de Navarra consiste en el diálogo entre fotógrafos contemporáneos y los vanguardistas que habitan la institución. En relación con este programa, se presenta la exposición De laboris  de Pierre Gonnord que se inaugurará el próximo miércoles.

Se trata de la última creación de este artista. El título de la muestra responde a la temática que se respira: el trabajo, en concreto, aquel que es anónimo, desconocido u olvidado por la sociedad. Consiste en una recopilación de 40 instantáneas que representan a jornaleros, mineros  y clanes de gitanos dentro de una fotografía intensa y penetrante.

A Gonnord se le conoce como fotógrafo desde finales de los 90, es un artista dedicado enteramente al retrato debido, en parte, a su fascinación por los de Ortiz-Echagüe, Napper, Laurent o Teison. Después de crear series en entornos urbanos, pasó a los grupos sociales amenazados por la globalización. Así lo explica él mismo: “He establecido una forma de vida y de trabajo basada en el encuentro con los demás, con otras realidades que me son ajenas, pero que también me unen a una única condición universal. Quiero sentir y celebrar el hecho de estar vivo, luchar contra el olvido de algunas personas, expresar a mis contemporáneos mi propia visión de las realidades que voy buscando y encontrando en mi andadura y de las cuales me siento solidario”.

Maximiliana. De laboris. Pierre Gonnord. Museo Universidad de Navarra.

El primer grupo reúne 15 retratos de gitanos, habla de los clanes, de las identidades nómadas basadas en los lazos familiares y la vida a la intemperie, aspectos que se ven captados en las miradas de estos individuos, cuyos rostros son el testimonio de una vida de intenso trabajo. En ellos se aprecia un mundo en el que perviven las costumbres ancestrales y la convivencia con la naturaleza. En este grupo destacan imágenes como Maximiliana, a la que Gonnord llama “emperatriz viuda respetada por el clan”, y  María, la mujer trabajadora amamantando a sus mellizos. Las fotografías de niños son también muy interesantes, son jóvenes vivos, avispados, traviesos y astutos, pero también observamos otros como Sandro, que trasmite melancolía e inocencia con una experiencia vital muy pesada. Estos clanes son comunidades de chatarreros y cuidadores de caballos que deambulan buscando dónde trabajar.

La siguiente serie recoge un conjunto de cuatro paisajes de las orillas del Guadiana. Ambientes naturales que enmarcan la vida de personajes que acuden al río a dar de beber a sus caballos o a descansar. En este caso, sigue hablando de comunidades gitanas nómadas. Gonnord expone su preocupación por estos grupos de individuos y por el maltrato que reciben del resto de la sociedad, pero curiosamente no tiene una intención periodística, social o de denuncia. Para el autor, sus fotografías son su experiencia vital y, por eso, tras conocer estas comunidades, aborda esta realidad humana estudiando a los personajes y su entorno. El fotógrafo muestra a estos sujetos, cuyo modo de vida parece abocado a la extinción y que en la actualidad es casi desconocido. Como él manifiesta, no desea ni clasificar ni documentar, sino apreciar a las personas en individual y sus historias, es una mirada a la condición humana. De los fotógrafos antes mencionados, de quienes recibe influencia, refleja esa naturalidad, fuerza y rudeza, presente en los retratos. Aunque la muestra se centre en los retratos de personas, no faltarán sus caballos. También expone alguna fotografía de cabras; ambos tipos de animales miran a la cámara sigilosamente. Cada animal con su nombre asignado “representa una fuerza de la naturaleza y de la vida”, afirma el autor.

De laboris se compone de otra gran serie centrada en el trabajo de las minas de carbón. La mina es, como dice el fotógrafo, “un universo laboral duro que infunde respeto, y sus trabajadores poseen unas cualidades casi heroicas, debido al riesgo extremo al cual se enfrentan a diario, en las entrañas de la tierra”. El colectivo de los mineros es cada vez más pequeño. El artista siente una especial solidaridad con estos trabajadores, cuyo oficio es de los más duros y arriesgados que existen. Las fotografías de estos mineros se realizaron en el mismo contexto laboral, pero los retratados posaron dentro de un estudio en un local cercano a la mina. Al captar a los personajes en un momento de su jornada laboral, se puede apreciar la suciedad que conlleva el oficio y los síntomas de cansancio en cada individuo. Esta serie se enlaza con la fotografía humanista de los años 50 que atesora el museo.

Podríamos resumir esta exposición en un recorrido por esos sectores olvidados y marginados de la sociedad, lugares donde reina un cierto silencio. En cada retrato contemplamos la historia y la introspección psicológica de cada persona, momento en el que no se habla estrictamente de una denuncia social o política, sino más bien de la humanidad y de nosotros mismos. Como dice Gonnord, cuenta la “dimensión espiritual y universal que reside en todos los hombres”. Ana Robledano Soldevilla. @ARobledano

Jason. 2013. De laboris. Pierre Gonnord. Museo Universidad de Navarra.
Vengador. 2014. De laboris. Pierre Gonnord. Museo Universidad de Navarra.
ROGIERO II 2014. De laboris. Pierre Gonnord. Museo Universidad de Navarra.
Suarez. De laboris. Pierre Gonnord. Museo Universidad de Navarra.
Armando II. 2014. De laboris. Pierre Gonnord. Museo Universidad de Navarra.