LA CONCIENCIA DE LA MATERIA EN ORO, PLATA Y PIEDRA

LA CONCIENCIA DE LA MATERIA EN ORO, PLATA Y PIEDRA

LA CONCIENCIA DE LA MATERIA EN ORO, PLATA Y PIEDRA

El Museo de Artes Decorativas presenta una retrospectiva del diseñador de joyas Chus Burés a través de esta exposición que recorre sus tres décadas de creatividad, experimentación y colaboración con artistas.

Materia y forma, artesanía y experimentación se unen indisolublemente en la obra de Chus Burés, un diseñador de joyas que ha sabido rebasar las fronteras de lo puramente ornamental para adentrarse en el campo de lo artístico. “Un diseñador tiene que ser al mismo tiempo artista y diseñador industrial”, defiende el propio Burés. Tal vez por eso, una parte de su producción se ha centrado en colaboraciones con pintores y escultores de fama internacional como Louise Bourgeois, Luis Tomasello, Miquel Barceló o Carmen Herrera. También Santiago Sierra, cuyo arte reivindicativo inspiró al creador de joyas para concebir una serie en la que reflexiona sobre los diamantes de sangre.

GOLDTRAFFICKILLS (anillo doble). 2005. Oro. En colaboración con Santiago Sierra.

Burés ha trabajado con cada uno de ellos para elaborar su propia colección inspirada en las obras de dichos artistas. Las líneas geométricas de Herrera, los juegos ópticos de Tomasello o las formas orgánicas marinas de Barceló cobran así un nuevo sentido fuera del lienzo, gracias a los objetos de oro y plata del diseñador. Normalmente desarrolla una edición limitada de estas piezas; “hace años podía llegar a los 20 ejemplares, pero últimamente solo se limita a seis más dos pruebas”, explica.

Gran parte de estas singulares joyas se exhibe ahora en el Museo de Artes Decorativas de Madrid bajo el título de Chus Burés. La conciencia de la materia. Es la primera retrospectiva –aunque el artista huya de esa palabra– que se organiza en torno al diseñador de proyección internacional, famoso por su horquilla matadora en la película dirigida por Pedro Almodóvar. Cerca de un centenar de obras, entre brazaletes, pulseras, anillos, pendientes y collares, se reparten por las dos plantas del museo, en un montaje tan singular como impactante, que potencia de forma individual cada pieza. Iluminadas de forma privada, cada una de ellas cuelga del techo y se exhibe junto a su correspondiente bola de cristal que la protege. De esta forma, se puede rodear la joya y apreciar los diferentes detalles que la componen.

Matador (horquilla). 1985. Plata. Creada expresamente para la película de Pedro Almodóvar. Fotografía: Béatrice Hatala.

La muestra ofrece un recorrido por los grandes hitos del autor, desde sus inicios –en los años 80– hasta la actualidad. Chus Burés (Barcelona, 1956) comenzó trabajando los materiales que encontraba en la calle: piedras, azúcar o chocolate, así como elementos de acabado industrial que, bajo sus manos, se convertían en joyas para decorar brazos, cuellos y rostros. Hacia mediados de los 80 modificó su modus operandi: primero la idea, después la selección de material. Llegaron así los oros, las platas y las piedras preciosas, pero también la seda, la cerámica o las plumas, consecuencia de sus viajes por el sudeste asiático. Ahora ha retornado al origen: el material de reciclaje, aunque sin perder de vista los elementos tradicionalmente considerados materia prima de las joyas.

“Es un diseñador global, mucho más que un artesano, porque ha concebido algo más que joyas”, reconoce Frèderic Bodet, comisario junto a Marc Benda de la muestra”. “Conozco a muchos diseñadores y todos son artesanos, además mantienen siempre el mismo estilo. Burés no. Ensambla y construye de forma diferente cada vez; quizá su estilo se pueda definir con dos conceptos: fluidez y curiosidad”, destaca el conservador jefe de colecciones contemporáneas del patrimonio de la Ciudad de la Cerámica y Porcelana de Sèvres y Limoges.

En efecto, su curiosidad le ha llevado a viajar por medio mundo para aprender las técnicas artesanales de las diferentes culturas, que luego ha modificado a su gusto. También existe una conjunción perfecta entre geometría y formas orgánicas; la primera se deja sentir de forma más intensa en las primeras salas, donde la línea y la curva son el punto de partida; mientras que las formas vegetales son más propias de sus obras posteriores.

El diseñador en una de las salas de la exposición.

Chus Burés. La conciencia de la materia podrá visitarse hasta el 16 de octubre. Después, es muy posible que inicie una itinerancia por ciudades españolas. Sol G. Moreno

Gaudí (pulsera). Bronce. Colección Recycling. Fotografía: De Vera / Granda.
Isabelle (colgante). Oro. Colección Joyas Disparadas. Fotografía: Béatrice Hatala.
Les Algues de Mer (collar). 2007. Oro. En colaboración con Miquel Barceló. Fotografía: Rafael Vargas.
S/T (broche). 2000. Plata. En colaboración con Louise Bourgeois. Fotografía: Juan Merinero.