La coliflor de 6 millones: Récord para Luis Meléndez
La subasta de la colección Saunders en Sotheby’s no alcanza los resultados globales esperados, pero sí ha marcado un nuevo precio máximo para el bodegonista. Naturaleza muerta con coliflor, cesta con huevos, puerros y pescados y utensilios de cocina se ha vendido por 5,9 millones de euros, incluidas las tasas.
La pintura española vuelve a protagonizar un excelente resultado en el mercado internacional. Esto a pesar del momento –ya no incierto, sino problemático– que está atravesando el sector.
Claro que, si la pieza en cuestión es una obra excelente, se encuentra seguridad incluso en la mayor crisis. Eso es lo que ocurrió en la venta de la colección de Jordan y Tomas A. Saunders en Sotheby’s.
El conjunto de 41 lotes obtuvo resultados desiguales, con varias ventas por debajo de las estimaciones inferiores –como las Mariposas de Jan van Kessel el viejo adjudicadas por 2,4 millones de dólares frente a su valoración de 3 a 5 millones– o en el límite (como con el pequeño boceto de Rubens del Rapto de Dejanira por Neso vendido por 1,6 millones de dólares frente a los 1,5 a 2 millones de estimación).
No obstante, incluso con esas salvedades, el martillo golpeó con cierto sonido triunfal con la pareja de óleos de Guardi –los más caros de la velada, adjudicados por 10,5 millones de dólares–, la naturaleza muerta de Jan Davidsz. De Heem –8,8 millones de dólares– el paisaje brasileño de Frans Post –récord para el artista con 7,3 millones de dólares– o la pareja de retratos de Frans Hals (7,9 millones de dólares).
Pero el resultado más relevante para nuestro mercado nacional fue el que cosechó Naturaleza muerta con coliflor, cesta con huevos, puerros y pescados y utensilios de cocina de Luis Meléndez, valorado de 5 a 8 millones de dólares y vendido por 6,2 millones de dólares (5,9 millones de euros).
Esta cifra se ha convertido en el nuevo récord para el bodegonista, uno de los más codiciados por los coleccionistas. El precio está justificado no solo por su evidente calidad y buen estado de conservación, sino por lo poco habitual del tema.
Tal y como ocurrió con las fresas de Chardin, solo se conoce de Meléndez esta representación de una coliflor. El experto en bodegón español Peter Cherry describió este lienzo como «un tour de forcé del naturalismo».
La casa de subastas solo ha podido proporcionar una provenance que se remonta a una colección inglesa hace 60 años, pero en este caso no ha parecido ser un problema para los compradores.
La guerra de pujas fue animada y la propia casa estuvo dispuesta a prolongarla aceptando incrementos tradicionalmente demasiado bajos (se pasó de 5 millones a 5.020.000 dólares, para subir a 5.050.000 y finalmente caer el martillo en 5,1 millones de dólares a los que sumar casi un 30% de tasas).
Un excelente resultado que apuntala a Meléndez y demuestra que si aparece la obra adecuada, siempre hay comprador para ella.
