Nunca se había visto una colección tan amplia en una subasta, como la que han conseguido reunir en Goya del famoso decorador Marc du Plantier (1901-1975). Al igual que otros diseñadores del siglo XX, como sus contemporáneos franceses, Jean-Michel Frank y Jean Royère, su estilo se desarrolla a partir de las “vanguardias neoclasicistas” de los años 1930-50, una época mal considerada y poco conocida que coincide con la ocupación alemana y la posterior crisis económica de la posguerra. Este nuevo resurgimiento de lo “neo” tras el acontecido a finales del s. XIX, en el que resucitan estilos del pasado y que el racionalismo ya creía haber acabado con él; sirven para que estos grandes creadores junto a Jacques Adnet, Andrè Arbus, Louis Süe, Paul Duprè lafon, Maurece Jallot, Jean Pacaud, Gilbert Poillerat, entre otros; desarrollen sus diseños “neobarrocos”, “neorrococós”, “neoclásicos” o “Luis XVII” inventado por Emilio Terry. Surgidos precisamente de ese cansancio de la austeridad de diseños anteriores, y que no dejan de ser otra cosa que la adaptación de épocas anteriores a los materiales del momento.
De técnica refinada y gran elegancia en todas sus creaciones, Marc du plantier encarna el pináculo del gusto francés, elogiado por su perfecto neoclasicismo, pero con un toque personal que lo diferencia de los demás. Trabajaba sólo porque quería sentirse completamente libre, no tenía oficina, ni tienda, sus clientes surgieron de las reuniones sociales al más alto nivel. De aquí probablemente provengan esta amplia colección de piezas, y que esta sala ha tenido el acierto de reunir. El relativo desconocimiento de su obra hasta hace unos años, junto a la escasez de estas en el mercado, han hecho de sus diseños algo muy apreciado entre los coleccionistas; elevando sus cotizaciones a precios realmente considerables. En los últimos tiempos en el mercado de las subastas, los únicos que han podido sacar a la venta alguna de las obras de este autor han sido Segre y esta casa. Consiguiendo precisamente Goya las mejores adjudicaciones y de las que ya hemos hablado en esta revista en más de una ocasión.
De los numerosos lotes que nos ofrecen en su catálogo (351 a 358), me gustaría llamar especialmente la atención sobre el 353 y 358. Posiblemente la tipología más reconocible del autor, dos mesas de escritorio de caoba, la primera de cinco cajones y la segunda de tres con tapa de cuero original. Y para las que se ha estimado un precio de salida testimonial de 3.000 y 4.000 euros respectivamente, siendo de esperar que su adjudicación final acabe en una cifra bastante más elevada. Máxime si tenemos en cuenta los últimos resultados en esta misma sala y que nos pueden servir de referencia aunque no se trate de muebles exactamente iguales. El pasado noviembre se remato uno (lote 521) de dos cajones forrado en cuero negro por 25.000 euros, algo menos en los que acabó aquí mismo el 20 de febrero de 2012 (lote 399) por 28.000 euros. Más parecido es el que se vendió en mayo de 2014 en Segre, en aquella ocasión en madera de cerezo (lote 821) por 22.000 euros. Es cierto que el mercado del arte en estos momentos sufre muchas fluctuaciones y que estos precios son meramente orientativos de lo que puede llegar a pasar. Muy interesantes también son el 351 y 352, perfectamente documentados, estas dos parejas de apliques de dos luces en hierro dorado de los años 40 en forma de lira, son un fiel reflejo del estilo de du Plantier. En este caso comenzarán por 1.800 euros cada uno. Por los escasos 150 euros en los que se ha pensado su salida, atentos al 353A, un sillón de escritorio de caoba y cuero con patas en forma de estípite, realizado por Lombardía Hnos. en los años 40, aunque mucho me temo que su remate final sea mucho más elevado.
Estupendo catálogo el que nos proponen para este mes de abril, en el que les podría recomendar bastantes piezas y que sin lugar a dudas van a conseguir excelentes resultados. Pero no me gustaría terminar sin advertirles de los interesantes pergaminos que sacan a la venta (240A – 241A), especialmente el 241A, una carta manuscrita de Don Fernando el Católico, firmada y fechada en 1516 y por la que no sería de extrañar que el Estado ejerciera su derecho de tanteo. Con un tamaño de 29 x 21 cm, se ha pensado por ella un precio de salida de 4.500 euros.
Para terminar, un par de oportunidades para aquellos que les guste la alta época: Por un lado el 239, cabinet de dos cuerpos franco-flamenco de finales del s. XVII en madera ebonizada con molduras rizadas y tulipanes grabados. Y base con puertas acristaladas del s. XIX perfectamente integrado en el conjunto. Saldrá en unos muy atractivos 900 euros. Por el otro el 259, un sencillo bargueño español de taracea de mediados del s. XVII sobre pie de puente posterior, comenzará en tan sólo 1.000 euros. Mariano Santos @AntgOln