El MNAC apela al ICOM y este lanza su comunicado

El MNAC apela al ICOM y este lanza su comunicado

El MNAC apela al ICOM y este lanza su comunicado

La última actualización sobre los procesos jurídicos de los bienes procedentes de Sijena fue la ejecución de la sentencia que dictó la devolución de estos a su monasterio de origen, y su llegada a donde los aragoneses esperaban “con cava aragonés para brindar” como tituló el diario El Mundo.


En respuesta a ello, el MNAC envió un comunicado con apelación jurídica al Consejo ejecutivo de ICOM-España (Comité español del Consejo Internacional de Museos), órgano de dirección de esta organización no gubernamental que agrupa a profesionales y museos españoles. En este describe su preocupación sobre el traslado diciendo que: “cualquier movimiento de obras de arte frágiles por naturaleza o condición, pone a estas en riesgo, riesgo evitable si dichos movimientos se reducen a los estrictamente necesarios y definitivos. Los bienes patrimoniales y, en particular, los de características tan delicadas, deberían únicamente ser reubicados cuando se ha de salvaguardar su integridad y no cabe otro remedio y siempre que dicho traslado conlleve un emplazamiento definitivo o permanente que la salvaguarde”. Por ello, el MNAC solicita a los poderes jurídicos que se asegure dicho asunto: “Queremos mostrar nuestra preocupación sobre el hecho de que pueda efectuarse un movimiento de obras de arte tan delicadas sin contar aún con una sentencia firme (no recurrible) que asegure que dicho movimiento no habrá de revertirse.”

El ICOM ha querido hacer pública esta solicitud para mostrarse de acuerdo con ella y aprovechar para expresar su opinión acerca de los últimos acontecimientos sociales turbulentos en Lleida.

Como ya se anunció, el pasado 11 de diciembre (día en que finalizaba el plazo en la sentencia para la devolución de bienes), la ciudadanía de la localidad catalana se agolpó en manifestación ante el museo en la noche del domingo al lunes. La concentración tuvo que ser disuelta con la entrada de los Agentes de la Guardia Civil y los Mossos d’Esquadra a las tres de la madrugada. Pero ahí permaneció inmóvil la manifestación hasta las 8 de la mañana con un incremento considerable de los asistentes que cada vez dejaba menos espacio a la entrada del edificio, negándose a desplazarse para dar ahuecar el paso, lo que provocó una carga policial.

Como decíamos, ante este acontecimiento ICOM ha declarado que desaprueba “la forma en que se ha producido la entrega de los bienes, mediante la insólita entrada policial a altas horas de la madrugada en un Museo que ha ofrecido su colaboración para tal entrega desde el primer momento (como no podría ser de otra forma)”. Asimismo, ha considerado “lamentable” la politización del asunto que ha desplazado completamente las certidumbres patrimoniales y museísticas; y la crítica que “ha cuestionado la profesionalidad de técnicos, colegas y museos sobre un asunto en que debieran prevalecer la cordura, el sosiego y las razones técnicas y legales, sin otras consideraciones espurias por ninguna de las partes”.

Dibujo de lo que fue la sala de las pinturas murales en el monasterio de Sijena.
Las pinturas murales en el Museo de Lleida
Detalle de las pinturas murales.