EL GRECO EN SUS PINCELES

EL GRECO EN SUS PINCELES

El Greco pintor. Estudio técnico es la culminación de tres décadas y media de estudio de la obra del Greco en el Gabinete de Documentación Técnica del Prado, y se presenta como fruto de la estrecha y fecunda relación que han mantenido la Fundación El Greco 2014 y el Museo del Prado. Su autora, o mejor dicho, la responsable de la interpretación crítica de este proceso de estudio, es Carmen Garrido, la que fuera responsable del mismo Gabinete hasta 2012, que ha contado con la colaboración científica y editorial de Jaime García-Máiquez, Técnico del Gabinete.

El excepcional número de originales que el Museo del Prado atesora del Greco, unido al de obras realizadas por miembros de su taller o seguidores, constituye el punto de partida para acometer el estudio técnico del proceso creativo del artista; de hecho, fue el cretense el primero en ser sometido a análisis por los técnicos del Gabinete de Documentación Técnica del Prado cuando éste inició su andadura en 1979.

Tras el análisis de esta colección, más de 150 obras atribuidas al Greco, a su taller y seguidores han pasado por la pinacoteca nacional para ser sometidos a estudios histórico-técnicos y de restauración, incrementando así la documentación disponible para comprender la obra del Greco, pero también el funcionamiento de su taller y su legado (argumentos fundamentales a la hora de separar las obras del maestro de las copias, imitaciones o derivaciones de sus seguidores).

Con todo este material, Garrido ha hecho una selección de 34 originales que revelan los aspectos más excepcionales de la técnica del Greco, y para demostrarlo, la publicación incorpora imágenes de gran calidad de las macrofotografías, radiografías, reflectografías, fotografías ultravioleta, estratigrafías, así como con estudios de soportes, pigmentos y aglutinantes, que han servido para el estudio de la evolución del Greco en las distintas etapas de su producción; partiendo de uno de sus primeros iconos en la etapa cretense, San Lucas pintando el icono de la Virgen del Museo Benaki, pasando por su etapa italiana y la influencia que ejerció sobre su pintura –tanto técnica como estéticamente– en obras como el Tríptico de Módena de la Galleria Estense, hasta su definitiva instalación en España, etapa en la que se analizan los distintos géneros pictóricos, desde el retrato y el cuadro devocional hasta los grandes proyectos de sus retablos, y en la que se incluyen dos obras finales e inacabadas que son fundamentales en su evolución.