Conexión multimedia con Van Gogh
El Ateneo Mercantil de Valencia muestra, hasta el 20 de octubre, Van Gogh Alive, una exposición multimedia que ofrece la oportunidad de sumergirse en la personalidad y la obra del artista neerlandés, mediante una experiencia que aúna arte, literatura, música, luz y color.
Se trata de una propuesta que invita al público a introducirse en el pensamiento de Van Gogh gracias a una pantalla gigantesca de 360 grados y más de 3.000 imágenes, dentro de un espacio de 1.000 metros cuadrados que se transforma en un gran lienzo.
Elena Goroskova, directora de Nomad Art y promotora del proyecto audiovisual, afirmó recientemente: “Estamos muy emocionados de presentar a Van Gogh totalmente renovado en estas majestuosas salas del Ateneo en una ciudad tan importante como Valencia. Hemos tenido muy buena acogida, pues ha superado incluso nuestras expectativas iniciales. Van Gogh Alive es la propuesta pionera que presenta la obra y esencia de este artista como nunca antes se había visto”.
Nomad Art, es el representante exclusivo de la exposición en España, una iniciativa que ya ha conseguido gran éxito en otras ciudades como Madrid o Barcelona. La combinación de arte y tecnología de vanguardia para acercar la cultura a un nuevo público son los ingredientes de esta receta que tan buenos resultados está dando.
La composición de esta muestra huye del concepto estático de las exposiciones propias de los museos tradicionales. Está dirigida a todos aquellos que quieren experimentar el arte desde una nueva perspectiva, por eso es la primera vez que se puede ‘pasear’ por La noche estrellada o perderse en los detalles de los autorretratos del pintor.
Precisamente ese carácter de no estatismo en la muestra, se enlaza con el dinamismo de la obra del pintor, esto se puede apreciar en su conocida obra Trigal con cuervos, en la que se representa un cielo dramático y nublado, unido a la sensación de aislamiento que se ve reforzada por un camino central que conduce a ninguna parte y un vuelo de dirección incierta de los cuervos. Sus trazos son nerviosos y no siguen una dirección única, lo que transmite inestabilidad, esa misma inestabilidad de la vida final de Van Gogh, que padecía física y mentalmente.
Para introducir al espectador en este singular universo de colores y sensaciones, la empresa Grande Exhibitions ha dispuesto 40 proyectores de alta definición distribuidos por todo el espacio, además de gráficos en movimiento con sonido envolvente de calidad cinematográfica y un entorno inmersivo con pantallas de seis metros de altura.
A las imágenes, los gráficos en movimiento y la música, hay que sumarle una colección de fragancias exclusivas que evocan los ambientes donde el pintor holandés creó sus cuadros. Así, suaves perfumes de limón, lavanda fresca, salvia silvestre o ámbar crean el ambiente perfecto para sumergirse en la pintura postimpresionista de Van Gogh. J.M. Escudero