Bea Zerolo, la nueva propuesta de Espacio MAdos
La galería madrileña, que inició su andadura en septiembre de 2020, inauguró ayer la exposición HILOS con pinturas de esta artista nacida en Madrid en 1975. Estará abierta hasta el 16 de octubre y quienes la visiten comprobarán la evolución de Zerolo en la pintura matérica, donde los materiales se rasgan hasta el límite de su destrucción.
Espacio MAdos nació con la vocación de Álvaro Alcázar y María Levenfeld de dar cabida y visibilidad a aquellos artistas que no tuvieran una galería que los representase o que no quisieran vincularse a una en concreto. Así se definían el pasado mes de septiembre del año pasado en su apertura: “La nueva galería intentará apostar por el arte emergente, pero se destinará sobre todo a aquellos autores que, aun siendo jóvenes, ya cuentan con una trayectoria y con una habilidad para mostrar sus propuestas”. Siguiendo ese camino, ayer presentaron la exposición HILOS de la artista madrileña Bea Zerolo.
La pintora presenta dos series fruto de su evolución en la pintura matérica. “La materia se rasga buscando grietas de las que surge la luz”, define ella misma. Geometría y color, forma y materia, no son solo medios de expresión artística, sino que forman parte de la obra misma. La relación entre el vacío y la esperanza, la herida y la salvación, la oscuridad y la luz, la superficie lisa y la grieta, es un constante diálogo en sus lienzos.
HILOS pone su mirada en los versos del compositor y cantante vasco Rafael Berrio (1963-2020): “El mundo pende de un hilo. / De un hilo pende el mundo. / Lo atroz y lo bello; / lo noble y lo vil. / De un hilo fino, de un hilo sutil. / Tal vez del grosor de un cabello”.
Bea Zerolo (Madrid, 1975) ha pasado de la figuración clásica, el impresionismo, el expresionismo, la pintura fundida y de veladuras, para llegar a la pintura matérica. Realizada con pigmentos, en sus obras obtiene unos resultados llenos de un cromatismo especial y personal. Desde 2019 ha mostrado sus trabajos en espacios como la Galería Gaudí o en la exposición colectiva Feel&Flow, ambas en la capital madrileña.
