ÁUREOS ROMANOS, RESELLOS Y PESETAS DE ISABEL II

ÁUREOS ROMANOS, RESELLOS Y PESETAS DE ISABEL II

 ÁUREOS ROMANOS, RESELLOS Y PESETAS DE ISABEL II


Durante este mes de noviembre han tenido lugar tres subastas de numismática muy relevantes, una en Alemania y dos en España. En la casa alemana Dr. Busso Peus Nahcf, que presentó varias sesiones: desde la subasta general en la que quedaron algunos lotes sin vender hasta la parte reservada a la colección de moneda romana en la que apenas quedaron lotes sin adjudicar. Lo normal es que una colección formada a lo largo de los años, con coherencia, ayuda a obtener mejores resultados. El coleccionismo no es solamente dinero, es tiempo, y una colección comprime, resume, esa dedicación. Los nuevos coleccionistas pueden ahorrar tiempo en estos remates de colecciones, lo que sin duda supone un premio. Destacaron  unos primeros lotes con piezas especiales: aes grave y otras piezas similares peculiares. Casi todo se vendió, con un incremento respecto la salida de entre un 50% y 100%. Varias piezas eran más asequibles y se remataron por debajo de 1.000 euros. Las más interesantes por conservación y factura han estado en torno a los 3.000 y 4.000 euros. La de Hatria, as 275/225, de 422 gramos, se remató en 16.000 euros (por debajo de la estimación); y otro ejemplar anónimo, aes grave dupondio, de más de medio kilogramo de peso, y con un pedigrí que se remontaba a una subasta de 1956, se llevó el premio golpeando el martillo de la adjudicación en 32.000 euros.

No hubo excesivas sorpresas en el abundante y bien representado periodo imperial. Los sestercios más cuidados se remataron entre los 1.000 y 3.000 euros; otras piezas más comunes entre los 300 y los 700 euros. El sestercio de Nerón, arco del triunfo en reverso, se vendió en 3.800 euros (siempre cifras de martillo). La excepción fue el buen remate del áureo de Póstumo, que teniendo un anverso atractivo, sin embargo no nos lo parecía el reverso. Su precio de salida era de 25.000 euros, pero encontró aprecio entre varios coleccionistas que lucharon hasta casi el doble, adjudicándose en 44.000. También sobresalió el decadracma griego, que se vendió en 28.000 euros.

5 pesetas de Isabel II. Filipinas. Vendida en 13.000 euros. Áureo & Calicó
Áureo de Postumo. Rematado en 44.000 euros. Dr. Busso Peus

Ya en España tuvieron lugar dos relevantes subastas: Aureo&Calicó de Barcelona, y  Jesús Vico de Madrid. En la Ciudad Condal se presentaban dos sesiones distintas: moneda romana y moneda española filipina. De la segunda parte se vendió la práctica totalidad, y además seis lotes se remataron con buenos resultados en cifras de cinco dígitos, lo que es muy destacable: un resello raro de Fernando VII de 1830 sobre un duro (12.000 euros), otro resello muy raro sobre un 8 escudos de Chile de 1826 (19.000 euros), otro resello de Isabel II sobre otra onza colombiana (31.000 euros), una prueba de Isabel II de 5 pesetas no adoptada (13.000 euros), un centavo de Alfonso XIII (15.000 euros) y un rarísimo 4 pesos de 1885 (33.000 euros). Cabe reseñar sobre todo la pugna que hubo por el duro de Isabel que salía en 7.500; el resto son buenas cifras, sin dejar muy atrás la salida, y casi siempre por debajo de las estimaciones que parecían algo ambiciosas.

Más contundente y llamativo fue el remate de la sesión de moneda antigua. Se vendió todo, y hubo más de sesenta lotes adjudicados en cifras de cinco dígitos, ocho de ellos en cifras de seis dígitos. Sin duda fue un remate muy importante, excepcional, aunque muchos eran lotes que salieron a subasta apenas cinco años atrás y que se habían vendido en cifras bastantes más altas entonces. Los dos remates más altos fueron dos rarísimos áureos en magnífica conservación: un ejemplar único de Carausio en 420.000 euros, y otro rarísimo de Caracalla y Plautilla en 260.000 euros.

Áureo de Caracalla y Plautillo. Vendido en 260.000 euros. Áureo & Calicó.
Áureo de Carausio. Vendido en 420.000 euros. Áureo&Calicó
Sestercio de Nerón. Rematado en 6.500 euros. Jesús Vico

Para terminar, la otra cita española nos trasladaba a Madrid, la subasta de Jesús Vico. El remate estuvo animado, logrando un buen porcentaje de ventas (más del 80%). Aunque varios lotes notables se vendieron en la salida o sin gran recorrido; así un sestercio de Nerón que se remató en 6.500 euros (salida 6.000), un raro áureo de Augusto que se remató en la salida de 10.000 euros, o la difícil trihemiestátera de Cartago que también se remató en la salida (8.500 euros). Es normal ya que son lotes para coleccionistas avanzados y exigentes.

Por otro lado, había numerosas piezas de moneda antigua hispánica que se vendieron en cifras accesibles, donde podemos distinguir dos tramos de precios: los más escasos y atractivos, generalmente acuñaciones argénteas, entorno a los 500 y los 1.000 euros; y el resto, entorno a los 200-400 euros. Sin embargo, en el apartado de moneda visigoda, las piezas que destacábamos en la previa, tres tremissis de Sisenando, Tulgan y de Wamba, esta vez no lograron comprador. Sí hubo otros buenos remates dentro de este apartado tan atractivo y difícil. En el apartado de monedas medievales sí hubo más licitadores, alcanzando, en líneas generales, buenos resultados. Podemos mencionar, el cuarto de real de Segovia inédito, que sí encontró una nueva colección que le acogiera adjudicándose en 3.600 euros. Juan Cayón