Algo más se esperaba de esta licitación, donde nos ofrecían un catálogo con algunos lotes relevantes como: las esculturas de Agustín Querol (Tortosa, 1860-Madrid, 1909) Dama y caballero (605) por 11.000 euros y Mariano Benlliure y Gil (Valencia, 1862-1947), Pastora Imperio (602) en 5.000 euros. O la plata 612, jarra cincelada, Alemania o Países Bajos época Felipe II, hacia 1570 pero con el pie, el vertedor y el asa del s. XVIII, tasada inicialmente en 30.000 euros; y el 613, jarro de pico en plata sobredorada, Sevilla hacia 1620 en 35.000 euros. Quedándose sin vender ante la falta de interés por parte de los coleccionistas. Especialmente llamativo fue la retirada de este último, debido como nos admitían en la sala, a las marcas apócrifas de la base, con la intención por el propietario de llevar a cabo un estudio más pormenorizado.
Ante todo esto, el marfil se convirtió en la sección hacia la que se dirigieron todas las miradas, gracias fundamentalmente a piezas tan interesantes como el 601. Un Niño Jesús parcialmente policromado sobre peana marmorizada. Siguiendo la tipología de Martínez Montañés, como el que realizó entre 1606 y 1607, para la Cofradía Sacramental del Sagrario de Sevilla. Uno de los más exquisitos llevados a cabo por el autor y auténtico referente iconográfico y modelo de creaciones posteriores. Su influencia será tremenda, tanto que de él beberán artistas tan relevantes como Juan de Mesa, los Ribas, Cano, etc. Esta figura que salía a la venta, ya estuvo en la exposición “En intima plegaria”, organizada por la Consejería de Educación, Cultura y Universidades en el Conjunto Monumental San Juan de Dios en Murcia en septiembre-noviembre de 2014. Se estimó por él un precio de salida de 4.500 euros y tras varios interesados uno de ellos en la sala y dos a los teléfonos, al final acabó adjudicándose por 10.000 euros a uno de estos últimos.
Buenas ventas también, aunque fuera por la salida, para el 599, “San Miguel” escultura en madera tallada y policromada con cabeza y extremidades en marfil, de la Escuela sevillana, hacia 1710 en 2.000 euros. Y el 600, “Niño Jesús bendiciendo” escultura en marfil tallado con restos de policromía de la Escuela indoportuguesa del s. XVII en 6.000 euros, los dos a los teléfonos. Estupenda compra la que realizó una persona en la sala por los dos tankard (610 y 611) alemanes de finales del s. XIX en marfil tallado, por dos piezas que tienen un precio bastante más elevado de los 2.250 y 1.600 euros que pagó por ellos desde los 2.000 y 1.200 en que salían. Máxime si tenemos en cuenta lo que han llegado a pagar por algunos de ellos recientemente en Ansorena y Balclis, ya descrito en un artículo anterior.
En cuanto a la plata, lo más destacado fue la adjudicación de tres lotes provenientes del Servicio del Oratorio del Real Concejo de la Mesta: Juego de cruz y candeleros de altar (614) de finales del s. XVIII y con un peso de 3.320 grs, por 2.750 euros desde los 1.800 en que partía. Juego de tres sacras de altar (619) en plata española, Madrid 1796 en 2.250 euros, habiendo comenzado en 1.500. Y un juego de Vinajeras (620), Madrid finales del s. XVIII, adjudicándose a una oferta en la mesa por 1.500 euros, desde los 900 en que se tasó inicialmente.
Pocas veces salen a subasta un guadamecí español del s. XVIII como este 640 en un buen estado de conservación en cuero estampado, policromado y dorado con motivos de jarrones florales y lambrequines. Estos generalmente se utilizaban para crear objetos de lujos como frontales de altar o retablos, revestimientos de murales, alfombras, cortinas o tapetes. Con unas medidas de 153 x 123 cm, pedían por el 6.000 euros y acabó en una oferta el teléfono en 6.500 euros. Mariano Santos @AntgOln