El ‘Cristo a la columna’ vuelve a su monasterio
Durante la posguerra española, la comunidad de religiosas del monasterio de Santa Sofía de Toro (Zamora) vendió dos esculturas de unos de sus retablos: La flagelación de Cristo de Sebastián Ducete y un San Pedro en lágrimas cuya autoría y paradero se desconoce. Recuerdan en la comunidad que apenas tenían dinero para comer y las necesidades sanitarias se multiplicaban. Años después, el Cristo apareció en el Rastro de Madrid y en 2013 fue vendido en una conocida casa de subastas de Barcelona y comprado por la Galería Caylus de Madrid.
En la galería, la obra fue estudiada y descubierta su procedencia. Tras algunas negociaciones, la obra fue cedida al convento temporalmente y exhibida en su emplazamiento original. Antes de que concluyera el préstamo el pasado mes de diciembre, los toresanos y las monjas organizaron rastrillos benéficos y recaudaron fondos para recomprar la pieza (véase aquí). Finalmente los propietarios, conocedores del esfuerzo de la comunidad y de los toresanos, decidieron rebajar el precio de la venta más de un 50%, hasta los 30.000 euros en que se ha vendido finalmente la escultura. Hace apenas unos días se firmó la venta y una de las empleadas de Caylus, Cristina Uribe, junto a su pareja, el toresano Álvaro de la Parra, acudieron al convento para celebrar el final de toda esta historia. La ciudad y el convento recuperan así una obra significativa de su patrimonio que ya puede visitarse en el lugar para el que fue creada, el retablo de la iglesia del monasterio. Ya solo falta recuperar aquel San Pedro en lágrimas. Tiempo al tiempo.